La participación del capitán de Marruecos en el torneo que se juega en casa había estado en duda después de que sufriera una lesión en los ligamentos del tobillo jugando para el Paris Saint-Germain ante el Bayern Múnich en la Champions League el mes pasado.
Desde entonces, ha habido especulaciones sobre su recuperación, pero el propio Hakimi, de 27 años, se ha mostrado confiado en la víspera del partido inaugural del domingo.
La selección marroquí arranca el torneo, que dura un mes, frente a Comoras en Rabat este domingo, aunque todavía no está claro si Hakimi recibirá más tiempo para recuperarse.
"Me encuentro bien. Estoy siguiendo el programa con los médicos y el entrenador (Walid Regragui). Después, veremos qué decide el míster. Podéis preguntarle a él", declaró a los periodistas.
"Me asusté tras la lesión. No quería perderme esta Copa Africana de Naciones que organizamos en casa.
Quería estar con el equipo. No sé cuándo jugaré, pero me siento preparado", añadió.
Regragui agradeció al lateral su esfuerzo durante el proceso de recuperación.
"Ha hecho un esfuerzo enorme", afirmó el técnico en la misma rueda de prensa.
“Su lesión no fue sencilla. Tomó decisiones difíciles por su país. Como entrenador y como marroquí, quiero darle las gracias delante de todos. Es un verdadero ejemplo a seguir".
Sin embargo, Regragui no quiso confirmar si Hakimi jugará ya en el primer partido del Grupo A este domingo.
"¿Sale de inicio o le damos descanso? Ya veremos, esa será mi decisión", dijo el entrenador. "Podría ser titular mañana... o no".
Hakimi fue elegido mejor jugador de África en la gala de la Confederación Africana de Fútbol el mes pasado, aunque acudió a la ceremonia en Rabat con muletas, lo que generó dudas sobre si llegaría a tiempo para la fase final.
Sin embargo, fue incluido en la convocatoria a principios de este mes y esta semana se le ha visto entrenando junto al resto de sus compañeros.
